05/07/2022 - El nuevo documental de Mladen Kovačević aborda la epidemia de viruela de 1972 en Yugoslavia con un enfoque que combina el relato de los hechos con una atmósfera de película de terror

El nuevo trabajo del director serbio Mladen Kovačević, Another Spring [+lee también:
tráiler
entrevista: Mladen Kovačević
ficha de la película], que acaba de estrenarse en la sección Proxima de Karlovy Vary, trata de la última epidemia de viruela en Europa, que estalló en Yugoslavia en 1972. Este documental, basado en material de archivo, adopta un enfoque que combina un relato procesal de los hechos con una atmósfera de terror, y lleva al espectador a explorar las diferencias políticas y sociales y las similitudes entre la situación de hace 50 años y la actual. 

El narrador, el Dr. Zoran Radovanović, la principal autoridad serbia en epidemias que estuvo en el centro de los acontecimientos de 1972, cuenta la historia en tiempo presente, en orden cronológico, y resume con datos precisos la cadena de causa y efecto. El paciente cero parece haber sido un hombre de Kosovo que fue a una hach en Meca y Medina, en un autobús que transportaba a los peregrinos y hacía paradas improvisadas en Bagdad, incluido su famoso bazar. Solo después del brote en Yugoslavia, Iraq admitió que estaban en medio de una epidemia. 

El hombre vuelve a su ciudad natal e infecta a un profesor de una escuela cercana, que contagia a 38 personas. Cuando el virus llega a Belgrado y la epidemia se anuncia de manera oficial, empieza una búsqueda de vacunas sin precedentes y los pacientes de Kosovo mueren a causa de la variante más destructiva de viruela, conocida como variola vera.   

Variola vera también es el título de una de las películas yugoslavas más importantes, dirigida por Goran Marković en 1982. Mientras dicha película era una historia desastrosa con un giro socialista, la forma en que Kovačević, la editora Jelena Maksimović y el ingeniero de sonido y compositor Jakov Munižaba tratan el material de archivo se acerca más a un enfoque visceral y casi primigenio del terror. El material de archivo, excepto los fragmentos de entrevistas televisadas con médicos, enfermeras y pacientes de la época, es ralentizado a la mitad de su velocidad y acompañado de un sonido monótono, taciturno y chirriante con un volumen bajo y una intensidad alta. Las grabaciones y fotografías, principalmente en blanco y negro, son aumentadas para resaltar la aterradora apariencia de la enfermedad.

Es inevitable que el espectador compare la población y las acciones del gobierno de 1972 con la situación del COVID-19. Lo que sucede es que, aunque las autoridades tardaron mucho tiempo en reconocer la enfermedad por lo que era —debido en parte a que fue erradicada en Yugoslavia en 1932, por lo que nadie se lo esperaba—, la respuesta fue rápida y muy bien organizada, con 18 millones de personas (casi el país entero) vacunadas o revacunadas.

Por supuesto, desde esta perspectiva, el contraste con 2020 parece extremo, y el material de archivo ralentizado parece subrayar esta distancia temporal. Pero la película también muestra similitudes, como la inicial falta de conocimiento entre los expertos en medicina y elementos de ignorancia en la sociedad, debido a motivos religiosos o tradicionales (la familia de un paciente rechazó la autopsia que podría haber confirmado la viruela y evitado muchas muertes). 

La forma en que Kovačević termina la película deja clara su postura y muestra los motivos por los que las personas confiaban más en las autoridades y en la medicina hace 50 años que ahora. Lo que supuestamente era un estado comunista y no democrático funcionaba mucho mejor, y de una forma mucho más humana, que los llamados gobiernos democráticos actuales y su dependencia del “libre mercado”. 

Another Spring es una coproducción entre la serbia Horopter Film y la francesa Bocalupo Films. Taskovski Films gestiona los derechos internacionales.

(Traducción del inglés)