20/04/2022 - Volker Sattel y Francesca Bertin retratan la lucha de la naturaleza contra un progreso ilusorio creado por la corrupción y el beneficio

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ficha de la película], de Volker Sattel y Francesca Bertin, que ha tenido su estreno mundial en la Competición Internacional del Festival Visions du Réel 2022, nos lleva a las afueras de Tarento, una región con todos los ingredientes de un locus amoenus, pero que se ha transformado con el paso de los años en un campo de juego para empresarios sin escrúpulos que sacrifican la naturaleza en aras del beneficio económico. La historia se centra en el Tara, protagonista indiscutible de este relato distópico. Se trata de un pequeño río en las afueras de Tarento, una antigua ciudad cerca del Mediterráneo, que debe su nombre al hijo del mítico dios del mar, Poseidón. A pesar de los altos niveles de contaminación, que se han vuelto cada vez más preocupantes, los lugareños creen que sus aguas son mágicas y tienen propiedades curativas.

La película de Volker Sattel y Francesca Bertin comienza con majestuosas imágenes del Tara y los paisajes próximos a Tarento, una ciudad con un pasado legendario dominado por la naturaleza, antes de catapultarnos hacia delante en el tiempo hasta la misma ciudad, ahora destrozada por rascacielos anónimos y fábricas monstruosas. Una tierra sacrificada en nombre de una voraz forma de progreso que lo engulle todo y a todos. Tarento y la exuberante campiña que la rodea han sido víctimas de una sociedad codiciosa donde rige la ley del más fuerte. La fábrica de acero (la antigua planta de ILVA), ubicada a pocos kilómetros de la ciudad, justo al lado del río milagroso, ya se ha cobrado varias víctimas: trabajadores indefensos que desconocían los peligros asociados a la inhalación de gases nocivos. Una situación que ha provocado divisiones en un tejido social de por sí frágil y maltratado. Sin embargo, a pesar de esta degradación que parece llegar a todos los rincones y que devora el rico entorno natural que sostiene y protege a los habitantes de Tarento, muchos de los vecinos del lugar luchan para preservar el pasado glorioso de esta ciudad, conocida como "la perla del Mediterráneo".

A través de planos que transmiten una forma de belleza arcaica, como fotos de un pasado ahora desvanecido, y demostrando gran empatía y respeto, Volker Sattel y Francesca Bertin entrevistan a hombres y mujeres que todavía luchan por sobrevivir. En un intercambio orgánico entre la cámara y estos héroes cotidianos, y con una elegancia formal que resulta sorprendente, Tara cuenta microrrelatos donde los mitos y las tradiciones ancestrales chocan con el racionalismo y el desarrollo económico. Las imágenes de archivo, donde observamos que la vía del progreso desenfrenado se inició hace muchos años, son particularmente sorprendentes y revelan una nueva tendencia decadente en la que las creencias populares sucumben ante el poder destructivo de ese progreso.

Con Tara, Volker Sattel y Francesca Bertin nos muestran la belleza en medio de la decadencia, el misticismo que se oculta tras las fachadas de cemento. La escena en la que un lugareño hace flores con botellas de plástico resulta especialmente conmovedora en ese sentido. Tara intenta reconstruir, encontrar un pasado y una dignidad perdidos, como si quisiera recordarnos que el cine tiene el potencial de provocar cambios, aunque solo sea durante un breve momento de solidaridad entre las cuatro paredes de una sala a oscuras.

Tara es una producción de fufifilm.

(Traducción del italiano)