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PRODUCCIÓN Irlanda

The Wolfwalkers: la Irlanda salvaje

por 

- El director de animación irlandés Tomm Moore estuvo la semana pasada en el Cartoon Movie presentando su próximo film, actualmente en producción

The Wolfwalkers: la Irlanda salvaje
The Wolfwalkers, de Tomm Moore

La semana pasada en el Cartoon Movie, el director irlandés de animación Tomm Moore (La canción del mar [+lee también:
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) desveló su tercer largometraje, The Wolfwalkers, que está actualmente en producción con Cartoon Saloon. Las imágenes presentadas transportaron inmediatamente al público al mundo colorido y mágico de las anteriores obras de Moore. Pero, en la última entrega de su tríptico celta, parece que el cineasta ha querido ir más allá y explorar un territorio más salvaje, con trazos más vagos y animaciones más nítidas.

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Arraigada en el folklore irlandés, la historia tiene lugar en el siglo XIX, en una época de gran puritanismo en la que los lobos eran percibidos como diabólicos. La heroína del film, Robyn, de 11 años, ayuda a su padre a cazar a la última manada que queda. Al principio, ella es una chica solitaria cuyo único amigo es un halcón; la aventura comienza cuando conoce a otra niña marginada, la salvaje Mebh, una wolfwalker. Con el tiempo, Robyn también se convertirá en wolfwalker —chica durante el día, loba por la noche—, y esta doble vida entrará en conflicto con la rutina junto a su padre. El malo, Oliver Cromwell, ya ha aparecido en numerosas ocasiones en el cine. En este film es retratado como un hombre militar sin escrúpulos, basado en un personaje histórico famoso por haber cancelado la Navidad. Él es el que quiere librarse de todos los lobos, y tiene en sus manos el destino de la familia de Robyn. The Wolfwalkers es una gran historia de amistad.

Una vez más, Moore juega con el contraste entre el mundo gris y aburrido de los seres humanos y el colorido de la naturaleza. Pero parece que su estilo va un paso más allá en esta ocasión: la ciudad es retratada como una cárcel, claustrofóbica y sin perspectiva, con un castillo siniestro lleno de sombras, mientras que el bosque es un lugar de inocencia. Y, a medida que nuestra heroína Robyn se adentra en sus profundidades, los trazos del personaje se hacen más vagos y las animaciones adquieren un carácter “todavía más salvaje”.

A modo de conclusión de la presentación, se proyectó un breve making-of en el que los diseñadores dibujan en las localizaciones, en el condado de Kilkenny, y en el que se muestran los primeros pasos en la transformación del boceto en animación. El vídeo pareció gustar al público, que pudo conocer una pequeña parte de la esencia de The Wolfwalkers y casi oler la campiña irlandesa.

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(Traducción del inglés)

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