04/09/2009

Desde su primera escena, The Ape [+lee también:
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ficha de la película], del director sueco Jesper Ganslandt, que ha sido la segunda película en ser presentada en la 6ª edición de las Jornadas de los Autores, sabemos que algo malo ha pasado y, conforme avanza la historia, que lo peor está por llegar. Un hombre, Krister, se despierta en un cuarto de baño, cubierto de sangre pero al parecer sin heridas. Se lava la sangre y sale de la casa, quién sabe si huyendo de la violencia o yendo hacia ella.

Durante el resto del día, la acción sigue los pasos de Krister en el trabajo, jugando a tenis con un amigo y visitando a su madre. Al tiempo que intenta mantener el control sobre una situación que el director define “estar perdido en un sueño perpetuo”, nuestra sensación de desagrado aumenta.

Ganslandt, que vuelve de este modo a esta sección independiente del Festival de Venecia tras presentar aquí su ópera prima Falkenberg Farewell [+lee también:
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ficha de la película] en 2006, ha declarado que hizo la película “porque sentí que necesitada hacerla. Con demasiada frecuencia leemos cosas horribles en los periódicos, pero quería entender el factor humano de acciones supuestamente inhumanas”.

El director estuvo acompañado por el protagonista Olle Sarri y el productor Jesper Kurlandsky en el encuentro posterior a la proyección. Sarri, que normalmente interpreta personajes cómicos, dijo haber sentido una empatía especial con el personaje, sobre todo porque no tuvo la oportunidad de leer el guión hasta que terminó el rodaje. “No podía decir no a una película en que no sabes que ibas a hacer cada día. Como había pocos actores en la película, Jesper [Gandslandt] y yo estábamos hablando todo el rato. En el sentido que hablaba conmigo miestras rodábamos una escena, pero yo no le respondía”.

Gandslandt ha comentado que no quería que ninguno de los actores estuviese condicionado por el guión, para que no juzgasen a Krister o sus acciones. Sobre todo Sarri debía permanecer al margen de los sucesos de la jornada que narra la película, del mismo modo que Krister tiene que darse cuenta lentamente de lo que ha perdido y cómo.

El productor Kurlandsky dice que estaba muy interesado en trabajar con el director por varias razones: “Me gustaban mucho sus películas anteriores y el modo en que ha intentado humanizar a Krister. Tenemos un acercamiento muy parecido al cien y quise darle libertad en lo que hacía”.

La cinta ha sido producida por Fasad con un presupuesto de 800.000 euros y será distribuida por Nordisk Film en las principales ciudades suecas a partir de finales de octubre. Las ventas internacionales dependen de Trustnordisk, que comenzará a hacerla circular a partir de la próxima edición del Festival Internacional de Cine de Toronto.

(Traducción del inglés)