23/05/2019 - CANNES 2019: Hablamos con el legendario director alemán Werner Herzog sobre su incursión en una realidad alternativa japonesa en Family Romance LLC

Presentada en el Festival de Cannes como una de las proyecciones especiales, Family Romance LLC es una cinta en la que Werner Herzog se dirige a Japón para contar la historia de una compañía especializada en alquilar a actores para satisfacer las diferentes necesidades emocionales de la gente: ya sea fingiendo ser el padre ausente de alguien o un empleado ferroviario, despreciado por crear el caos cuando un tren se va a la hora equivocada.

Cineuropa: Tu película me recordó a ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?, de Philip K. Dick. ¿Crees que estamos llegando a un punto en que deberíamos empezar a cuestionar nuestra realidad?
Werner Herzog: Ese es uno de los mejores títulos que existen. Nunca lo leí, pero conozco muy bien el contenido porque se aludía a él en mi película Lo and Behold: el inicio de Internet. Un cineasta que no lee, no llega a ninguna parte. Aunque en este caso, no tenía tiempo, estaba intentando entender los patrones del metro de Tokio.

Es cierto que ya no tenemos una idea clara de lo que es real y lo que no, lo que es mentira y lo que es "fake news". Todas estas preguntas se han intensificado: sabemos lo que está en camino, y todos los que están en Facebook, por ejemplo, saben que es la autorrepresentación estilizada. Todo es fabricado, pero las emociones son auténticas y el odio, genuino, hasta el punto de que lleva a niños que van al colegio a suicidarse. Cuando me buscas en internet, hay por lo menos 30 Werner Herzogs falsos. Todos son falsificaciones, pero no puedes evitarlo, así que siempre digo que son mis guardaespaldas gratis.

Algunos de los servicios que proporcionan en la película son realmente peculiares; como el que te permite experimentar la muerte sin morir.
Ese me lo inventé yo, pero en Tokio, resulta que hay una moda loca entre la gente joven que quiere experimentar la muerte en un tanatorio. Así que no es tan descabellado. Hay algunas cosas que nos resultan extrañas, como la parte sobre un conductor de tren que cierra las puertas 20 segundos antes de tiempo, con niños ya dentro y sus padres todavía en el andén. Oí que hace un año, esta compañía tuvo que publicar disculpas a toda página en los periódicos por un incidente de este tipo, así que desarrollé una historia en la que mi protagonista [Yuichi Ishii] asume la culpa, a pesar de que el verdadero culpable está a su lado. Le pagan por cargar con la culpa. 

En esa escena, es muy difícil distinguir entre realidad y ficción.
Es un largo de ficción, así que cada línea de diálogo y cada escena se basa en un guion. No hay ninguna ironía en ello, es una realidad que solo sucede en las cintas de ficción, si es que se puede hablar de realidad. Cuando miras el cine actual, hay varias fórmulas básicas. Nada es completamente nuevo: siempre hay una escena en la que alguien conduce un coche o charla durante la cena. Incluso en las películas de fantasía, casi esperas que aparezca un dragón volando. Pero estoy muy seguro de que en Family Romance LLC, no hay nada que se haya visto antes.

¿Dirías que te ayudó a comprender Japón y la forma en que la gente entiende la intimidad allí?
Para los occidentales, siempre hay un halo de misterio en torno a Japón. Pero el hecho de que no lo comprenda todo no significa nada. Anoche, un espectador japonés se acercó a darme la mano. Le pregunté: "¿Estaba todo mal?". Me respondió: "No, somos justo así". No me preocupa haber fallado.

Has dicho que esta película es en cierto modo un regreso a tus raíces.
Estaba cansado de que las aseguradoras me dijeran dónde podía rodar. Quería volver a la época de Aguirre, la cólera de Dios, a una forma más sencilla de hacer cine. En Aguirre, necesitaba a algunas personas, porque siempre estaba moviéndome con los conquistadores españoles, pero casi no había equipo. Incluso cuando una película está bien preparada, me gusta dejar la puerta abierta a que algo loco o increíble se apodere de ella, como en Teniente corrupto, con esas iguanas que solo nosotros podemos ver. Es como una conspiración que solo conocen él y los espectadores. En Aguirre, vivíamos en balsas, y nunca sabías qué había en el siguiente recodo del río. Podía ser una cascada o un pueblo hostil a lo que hacíamos. Me gusta esta actitud básica para volver a la gran alegría de hacer cine.

(Traducción del inglés)