email print share on Facebook share on Twitter share on LinkedIn share on reddit pin on Pinterest

BÉRGAMO 2018

Liv Ullmann • Directora y actriz

“Debe haber un motivo por el cual siempre pienso en términos de mujeres”

por 

- La semana pasada, Liv Ulmann fue la invitada de honor en la 36ª edición del Bérgamo Film Meeting, donde hablamos con ella sobre su carrera y ser una mujer directora

Liv Ullmann  • Directora y actriz

Para Liv Ullmann, ser la musa del maestro sueco Ingmar Bergman sólo fue un mayor impulso para convertirse no sólo en una actriz de cine y de teatro única y mundialmente reconocida, sino también en una guionista y directora consolidada. La semana pasada, Ullmann, para quien el amor al cine empezó de niña (provocado por tres películas del maestro italiano Vittorio De Sica), fue la invitada de honor en la 36ª edición del Bérgamo Film Meeting (10-18 de marzo), que le dedicó una retrospectiva que incluía todas sus películas como directora, desde Sofie (1992) a Miss Julie [+lee también:
tráiler
entrevista: Liv Ullmann
ficha de la película
]
 (2014), además de muchas de las obras maestras a las que dio vida como actriz, un monográfico y una exposición. Cineuropa ha charlado con la actriz y directora noruega sobre su carrera, ser una mujer directora y otros temas.

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

Cineuropa: Empezaste a dirigir después 35 años de carrera cinematográfica. ¿Por qué (sólo) entonces?
Liv Ullmann:
Porque realmente nunca había querido ser directora, ni se me había ocurrido. Sin embargo, era autora literaria y daba muchos discursos, así que me pidieron escribir un guión para una producción danesa. Lo hice y les encantó el guión, así que dijeron: “¿Por qué no la diriges tu misma?” Respondí, “¿Va en serio?” pero luego llamé a Ingmar y le pregunté, “¿Crees que puedo dirigir?” Y su respuesta fue, “Sí, puedes dirigir”, y continuó apoyándome después de eso. Así que dirigí la película y, de repente, de hecho, la primera semana, comprendí que había sido actriz durante tanto tiempo que ya había aprendido cómo dirigir: ahora podía hacer todo lo que como actriz había echado de menos por parte del director.

¿Te ha parecido difícil, a lo largo de los años, ser una mujer directora?
Sí, hay obstáculos por ser mujer y directora, en lo que respecta a obtener respeto, pero gran parte de ello también tiene que ver conmigo como mujer, y al principio no fui la mejor. Corría de un lado al otro preguntando, “¿Quieres que te traiga un café? ¿Hay algo que te gustaría que hiciera por ti?”, porque así es como me educaron. Después de la primera semana comprendí que eso no era lo que se suponía que debía hacer una mujer, y desde luego, no una mujer directora. También estaba el impacto negativo del hecho de que era actriz; me refiero a que si ya te menosprecian como a una persona débil porque eres mujer, aún es más cierto si también eres actriz. Así que también tuve que luchar contra eso, pero los actores se adaptaron muy bien a mí. Les di mucha confianza y libertad, y les gustaba el hecho de que dependía mucho de su creatividad y creía en ella, por lo que una vez me tuve a los actores de mi lado y empecé a comportarme como una mujer adulta, salió bien. También me sentí mejor como actriz, debido al respeto que sentía por los actores. Me encanta ser directora, tanto de cine como de teatro.

Todas tus películas han tenido protagonistas femeninas. ¿Considerarías alguna vez hacer una película que gire en torno a un personaje masculino?
A lo mejor me centro en las mujeres porque tiendo a volverme un poco autobiográfica, como me pasa en mis libros, tiendo a profundizar en mi propia historia… ¿Pero sabes qué? ¡Es muy buena idea! Por desgracia, ya no voy a dirigir más, pero nunca me han hecho esa pregunta y, ahora que lo pienso, ¡me hubiese gustado hacerlo! Debe haber algún motivo por el cual siempre pienso en términos de mujeres; significa que siempre pienso en términos de lo que sé. Pero de hecho sí, me hubiese gustado escribir una historia sobre un hombre, de la manera en que yo lo entiendo. Desafortunadamente, es demasiado tarde para jugar con esa idea, ya que he decidido no volver a dirigir nunca más.

Debido a que tu carrera ha sido muy internacional, conoces bastante bien tanto el ambiente americano como el europeo. ¿Te parece que el ambiente de trabajo es distinto a ambos lados del charco?
En el cine sí. En Estados Unidos, todo es muy grande; hay mucha gente involucrada, y los sindicatos son muy fuertes. Si eres un director, no puedes mirar a través de la cámara, y hay muchas cosas que son complicadas. Creo que me siento más cómoda en un ambiente europeo, pero en cuanto al teatro, ya sea en Estados Unidos, Australia, Londres o en cualquier otro lugar, es más o menos igual. En Noruega, por supuesto, no tiene nada que ver; allí, no soy sólo una mujer, no soy sólo una actriz, no soy sólo mayor, sino que además soy noruega.

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

(Traducción del inglés por Marta Quirós)

¿Te ha gustado este artículo? Suscríbete a nuestra newsletter y recibe más artículos como este directamente en tu email.

Privacy Policy