31/08/2023 - VENECIA 2023: En la película de Liliana Cavani, el inminente fin del mundo hace que salgan a la luz secretos inconvenientes que no tienen por qué suponer... el fin del mundo

Claudia Gerini, Angelica Devi, Edoardo Leo, Fabrizio Rongione, Valentina Cervi, Richard Sammel, Alessandro Gassmann y Kseniya Rappoport en The Order of Time

L’ordine del tempo [+lee también:
tráiler
ficha de la película], la nueva película de Liliana Cavani con la que se inaugura la sección fuera de competición de la 80.ª edición del Festival de Venecia, cuenta con un excelente reparto de estrellas europeas. Se trata del primer largometraje de ficción de la directora desde El juego de Ripley [+lee también:
tráiler
entrevista: Liliana Cavani y John Malk…
ficha de la película] en 2002, ya que, durante todos estos años, ha estado ocupada con proyectos televisivos sobre Einstein y Francisco de Asís, así como con diversas historias policíacas y la puesta en escena de unas cuantas producciones de ópera. No está nada mal para una cineasta que acaba de cumplir 90 años y lleva ocho décadas en activo. Cavani es, por tanto, la justa merecedora del León de Oro a la carrera cinematográfica que ha obtenido en la edición del Festival de Venecia de este año.

Coescrita con Paolo Costella, la nueva película de Cavani comparte múltiples rasgos con la taquillera película que Paolo Genovese realizó en 2016, Perfectos desconocidos [+lee también:
crítica
tráiler
ficha de la película] —también coescrita por Costella—. En aquel largometraje, como en este, un grupo de viejos amigos —en su mayoría gente de ciudad— se reúnen para pasar una noche de fiesta durante la cual se revela algún que otro secreto comprometedor, con la diferencia de que, mientras en Perfectos desconocidos lo hacen mediante un juego de intercambio de mensajes de texto, en L’ordine del tempo es un posible desastre natural del fin del mundo lo que desencadena los consiguientes sucesos incómodos. El ensayo de 2017 del físico italiano Carlo Rovelli sobre la gravedad cuántica de bucles, El orden del tiempo —que a su vez coincide con el título de la película—, proporciona información adicional sobre el tema en torno al que gira la historia. La obra nos traslada a una hermosa casa de verano junto al mar, donde la abogada Elsa (Claudia Gerini) y el médico Pietro (Alessandro Gassmann), junto con su hija —todavía estudiante— Anna (Alida Baldari Calabria), invitan cada año a sus amigos a celebrar el cumpleaños de Elsa. El grupo de amigos lo completan la profesora de Historia Paola (Kseniya Rappoport), el economista Victor (Richard Sammel), el psicoanalista Jacob (Fabrizio Rongione), la profesora de Ciencias Greta (Valentina Cervi), la periodista Jasmine (Angeliqa Devi) y la física Giulia (Francesca Inaudi). El físico teórico Enrico (Edoardo Leo) es el último en incorporarse a la fiesta, y lo hace de mala gana porque le preocupan varios problemas de diversa índole, entre los que destacan cierta tensión amorosa no resuelta con una de las invitadas y la dichosa historia del fin del mundo cuyo protagonista es un asteroide interestelar que se acerca a la Tierra a gran velocidad.

A medida que el asteroide avanza sin frenos, se van produciendo reacciones de todo tipo entre los invitados a la fiesta. Resulta que Enrico no es el único con asuntos sin resolver, y es que no faltan las traiciones de todos los colores y tamaños. Se suceden confesiones y revelaciones, seguidas de reflexiones, reacciones, arrepentimientos, renuncias e incluso reconciliaciones. En su conjunto, se trata de gente indiferente y desilusionada. A Elsa, en particular, no parecen importarle demasiado los diversos flirteos y travesuras de Pietro —está claro que no los ve como el fin del mundo—. Al contrario, todos se ponen a bailar al ritmo de Leonard Cohen al tiempo que cantan "Dance Me to the End of Love" al unísono en una escena que probablemente lleva implícita una intención profundamente irónica. Los mejores momentos, y también probablemente los más "cavanianos", se producen en las escenas en las que Giulia y una maravillosa monja (la igualmente maravillosa Angela Molina) debaten sobre los aspectos esenciales de la existencia, de manera que se presenta la religión como algo pragmático. Por encantadora que sea la casa de verano, y por geniales que sean las personas que la habitan y los actores que las interpretan, esta parte constituye una película en sí misma, aunque una demasiado corta que quizá merezca la pena ver un par de veces más —¿dará tiempo a verla antes del próximo fin del mundo?—.

L’ordine del tempo ha sido producida por la belga Gapbusters en coproducción con las italianas Indiana Production, RAI Cinema y Vision Distribution (que también se encarga de las ventas internacionales).

(Traducción del inglés)