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CANNES 2018 Quincena de los Realizadores

Crítica: Joueurs

por 

- CANNES 2018: El primer largometraje de Marie Monge sigue con vitalidad la espiral tóxica provocada por el flechazo de una joven por un adicto al juego

Crítica: Joueurs
Stacy Martin y Tahar Rahim en Joueurs

"Ponemos toda nuestra vida sobre la mesa. Y cuanto más estás en la mierda, más necesitas volver a hacerlo y más adrenalina sientes ". Al retirar el velo del universo subterráneo, nocturno y peligroso de los clubes de juego parisinos a través de los ojos de una "inocente" embarcada en una historia de amor pasional por un hombre atractivo y compulsivamente enganchado al juego de cartas el Punto y Banca, Joueurs [+lee también:
tráiler
entrevista: Marie Monge
ficha de la película
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es elprimer largometraje de la joven cineasta francesa Marie Monge. Esta ha entrado en la 50ª Quincena de los Realizadores del 71º Festival de Cannes con una película de género en ebullición. Es una historia llena de golpes de suerte donde los sentimientos de la protagonista son puestos en tela de juicio en una atmósfera donde la huida hacia adelante recuerda a una caída libre vertiginosa que roza la embriaguez. En esta caída, conseguir no quedarse paralizada por el hecho de perder le proporciona una peligrosa sensación de libertad y de ser invencible. Los cantos de sirenas llaman desde el dinero, pero, si quiere volver a meterse, una y otra vez, en ese mundo, necesita encontrar dinero en caso de que no gane nada. 

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Ella (la excelente actriz Stacy Martin) es la dueña de un pequeño restaurante que tiene junto a su hermano cuando aparece de repente Abel (Tahar Rahim que nos hace degustar una exquisita interpretación), un chico joven simpático, casanova y parlanchín, con una gran vivacidad y que no se avergüenza de las reglas a seguir para postular a un trabajo de camarero que Ella, divertida, impone para darle una oportunidad. Pero la noche siguiente, el joven huye con una parte de la caja. Ella le sigue en una persecución por el metro al final de la que Abel, que se divierte con la situación y con las dudas de la chica sobre denunciarlo o no, va a llevarla a un club de juego donde ya le conocen. Por curiosidad, Ella acepta y gana más de 9 000 euros. Su prudencia y reserva van a desaparecer rápidamente, un idilio está gestándose mientras que Abel inicia a su nueva compañera en los engranajes que hacen funcionar el mundo del juego. Sin embargo, las facetas más oscuras del personaje se revelan bien pronto metiendo a, la muy enamorada, Ella en problemas cada vez más importantes... 

La directora es la encargada de poner el guion a esta obra junto a Julien Guetta y Romain Compingt. Joueurs favorece la rapidez del desarrollo de la narración (entre otros, con una hábil manera de presentar los usos y costumbres del juego, una bella elipse temporal que hace cambiar de golpe la narración a una segunda fase y una montaña dinámica), una cámara muy cerca de la acción y los colores (fotografía de la mano de Paul Guilhaume) ponen el broche de oro a la oscuridad que domina la película. Hay unos procesos que esconden algún que otro fallo (nudos de la historia un poco fáciles, una puesta en escena a veces sin gran originalidad) en beneficio del ritmo y de un giro hacia la acción pura cuando los "malos" aparecen. Pero la última guinda del pastel da a este primer largometraje una verdadera coherencia y su vitalidad y su atmósfera gustarán sin ninguna duda a muchos compradores internacionales.

Las ventas de Joueurs, producida por The Film, corren a cargo de Playtime.

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(Traducción del francés por Begoña Carrasco González)

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