27/09/2017 - Matjaž Ivanišin va desde los juegos mediterráneos masculinos a las diferentes interpretaciones de la palabra “juego” en el mejor documental esloveno del año

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tráiler
ficha de la película], de Matjaž Ivanišin, ganó la semana pasada el Premio Vesna al mejor documental en el Festival de Cine Esloveno, celebrado en Portoroz (ver las noticias), después de su estreno mundial en el FID de Marsella. La película es una mezcla de varios tipos de documentales que sorprende constantemente al espectador durante los 60 minutos de duración, mientras le hace reír, pensar y reflexionar. 

El principio de la película hace honor a su título con la visita del director a un torneo turco de lucha en aceite. A este deporte masculino por antonomasia (a pesar de su aspecto homoerótico) le sigue la puesta en escena casi teatral de un deporte siciliano: un sacerdote católico nigeriano sale a un balcón del pueblo de Novara con una rueda de queso Maiorchino en las manos y contándonos su historia. Después, vemos varias escenas de la rueda bajando por las calles estrechas y adoquinadas y, cuando se detiene, un lugareño nos cuenta un par de anécdotas divertidas relacionadas con el juego. 

A este deporte le sigue la morra, un juego que se juega con las manos. Las reglas son difíciles de comprender y, además, tiene muchas variantes a lo largo del Mediterráneo pero es tan cinematográfico que mientras ves el documental no te importa saber quién es el ganador. Los hombres, por parejas, sacan una mano cada uno mostrando los cinco dedos mientras gesticulan y gritan números, a veces en el tono agudo característico de los italianos, aunque el juego también se practica en las zonas eslovena y croata de la península de Istria. 

Después de un baile y de un par de deportes que ya no se practican y sólo existen en la memoria del folklore, el director decide grabarse a sí mismo mediante un divertido artilugio que es demasiado sorprendente y efectivo para ser desvelado aquí. El director busca entre sus recuerdos un partido legendario de un deporte muy particular conocido en todo el mundo pero de gran relevancia en el Adriático y en toda la región mediterránea.   

Playing Men es un documental que juega, nunca mejor dicho, con la mentalidad y las tradiciones asociadas a la palabra “juego” y sus diversos usos: deportes, música o interpretación, tanto en nuestra vida personal y en los roles que desempeñamos como en el sentido literal, teatral y cinematográfico. Con su estructura dinámica, su división en dos partes (social y personal) y sus referencias culturales tanto locales  como globales, explora las expresiones y connotaciones de la masculinidad, que a menudo se ve alterada por un simple cambio de contexto. Por otra parte, la noción de competitividad nunca se menciona de forma explícita pero está presente inevitablemente en las diferentes capas de la narrativa.

Playing Men es una coproducción entre la compañía eslovena Nosorogi y la croata Restart.

(Traducción del inglés por Carolina Benítez)