28/03/2024 - La productora mexicana afincada en Suecia piensa que trabajar en el documental es una oportunidad única a través de la cual explora cuestiones y temas que le apasionan

Una entrevista con Mónica Hernández Rejón, productora de la compañía sueca Pråmfilm, la cual ha sido seleccionada para el programa Emerging Producers de 2024. Échale un vistazo a su perfil aquí.

¿Por qué produces documentales? ¿Ves el cine documental como una herramienta para el cambio social y político?
Mónica Hernández Rejón: Como productora de documentales, veo mi trabajo como una oportunidad única de formar parte de procesos creativos en los cuales soy capaz de explorar preguntas y temas que me apasionan. Me veo con el poder de dejar un espacio abierto para aquellos que están detrás y en frente de la cámara, para que ganen visibilidad y puedan ser escuchados y entendidos. Pero, para mí, la mejor parte es la posibilidad de conocer al público. Verlos tener una conexión emocional o incluso experimentar una transformación personal gracias al trabajo que hemos hecho, tiene mucho significado.

Sí, creo que las grandes posibilidades de crear empatía hacen que los documentales sean una de las mejores plataformas para expandir perspectivas, para transformar el mundo. Sin embargo, sé que también conlleva un riesgo asumir que cambiar el mundo es una misión intrínseca de los documentales. Creo que esta tendencia a veces motiva la reproducción y reafirmación de relaciones de poder problemáticas en nombre del cambio social. Por ejemplo, con la representación indiscriminada de cuerpos e historias de personas que no son blancas para probar puntos de vista políticos o, incluso peor, obtener fondos. También me he dado cuenta de que hay una tendencia a reducir el poder de los documentales a determinadas agendas o ideas preconcebidas sobre el aspecto del cambio social y político. Pero, por supuesto, es increíble lo que los documentalistas han conseguido en lo que al cambio político se refiere y estoy orgullosa de formar parte de una comunidad tan comprometida y sentida.  

¿Cómo logras y mantienes ese equilibrio entre la vida laboral y personal y, además de todo, fomentas el bienestar general?
Mi respuesta espontánea es que mantener el equilibrio entre la vida laborar y la personal y un bienestar general es una tarea imposible para una productora de documentales, sobre todo para aquellas que trabajamos de forma independiente. Muchas veces tenemos problemas con la falta de tiempo y recursos, la incertidumbre financiera y el miedo de no cumplir con las necesidades de la industria de la producción y el cine. Es un trabajo que conlleva mucha responsabilidad y, muchas veces, un (auto)cuestionamiento de nuestras propias decisiones y capacidades.

Pero, para mí, el equilibrio y el bienestar tiene mucho que ver con la agencia y saber poner límites. A lo largo de los años he aprendido a centrarme en mis propias metas, en lo que quiero conseguir con cada proyecto, tanto a nivel profesional como personal. Desde esa perspectiva, puedo llegar a sentirme muy conectada con los proyectos y se me hace más fácil lidiar con todos los retos que mi trabajo implica. También creo que es muy importante saber poner buenos límites y cuidar de mi misma al ser capaz de distinguir lo que se espera de mí como productora y lo que realmente soy capaz de hacer como ser humano. Eso me ayuda a entender que a veces el estrés y la ansiedad me los ocasiono yo misma y, por lo tanto, tengo control sobre ellos.

¿Cómo encuentras al público para tus películas?
Todos los proyectos con los que trabajo implican un nivel de dificultad en cuanto a distribución. Muchas veces abordan temas controversiales, están hechos con poco presupuesto y por jóvenes directores que están haciendo su primera o segunda película. Sin embargo, esto también nos ha abierto nuevas posibilidades tanto a mí como a mi equipo, ya que nos hemos visto empujados a ser creativos y proponer nuevas maneras de distribuir nuestras películas. Por ejemplo, mediante campañas de impacto o actos autofinanciados. 

¿Qué proyectos tienes en marcha (incluidas películas de ficción y otros proyectos)?
Este año me estoy centrando principalmente en cuatro proyectos. Reflexion es un largometraje documental dirigido por MyNa Do y Farah Yusuf, que cuenta una maravillosa historia sobre el uso del arte y la amistad como herramientas para combatir el racismo en Suecia. Este proyecto se encuentra en estado de posproducción y estamos buscando distribuirlo. Liberté, dirigido por Martin Möller, también es un largometraje documental y trata sobre la idea de libertad en Nueva Caledonia desde la perspectiva de dos activistas canacos. Este es un proyecto muy complejo, ya que explora la difícil cuestión de cómo manejar el desequilibrio de poder entre los documentalistas y los participantes cuando se graba desde una perspectiva externa. Boundaries, dirigido por Victoria Verseau, también es un largometraje documental que trata temas complicados. Cuenta la exploración de una directora en cuanto a los límites que tiene como víctima de abuso sexual. Tanto Liberté and Boundaries se encuentran en desarrollo y estamos buscando coproductores en Francia y Noruega, respectivamente.

También estoy trabajando en un cortometraje de ficción como guionista, directora y productora. Es un drama/thriller sobre la desaparición sistemática de las mujeres en México, aunque la historia tiene lugar en Suecia y será un poco experimental con un toque de surrealismo.

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EMERGING PRODUCERS es un destacado proyecto promocional y educacional, que reúne a talentosos productores europeos de documentales. El programa está organizado y comisariado por el Festival Internacional de Documentales de Ji.hlava.

La fecha límite para presentar una solicitud para la edición EMERGING PRODUCERS 2025 es el 31 de marzo de 2024.

(Traducción del inglés por Joanna Sánchez Moya)